miércoles, 26 de septiembre de 2012

¿La soberanía nacional reside en el pueblo español…?


El Siglo XX inauguro un modelo constitucional al que se le denomino Constitucionalismo Social. La constitución de México de 1917, la Alemana de Weimar de 1919, la austriaca de 1920 e incluso la Constitución española de 1931, recogen ese espíritu de entreguerras que pretendía conjugar las exigencias de ampliación de derechos, una mayor protección social y sobre todo de una democracia plena y real; con las cesiones que la clase hegemónica en aquel momento hace a cambio de una cierta “paz social”. La Crisis del 29 se llevo por delante estos modelos constitucionales, en muchos casos gestionados por la socialdemocracia europea, que en lo económico aún no había conocido a Keynes. Tras la II Guerra Mundial en Europa se desarrollo una segunda fase de ese Constitucionalismo Social, recogiendo ahora si, las aportaciones económicas de Keynes, y las sociales de Beveridge, frente al contrapeso que suponía el bloque soviético, pasando de un concepto de Estado Social al Estado del Bienestar, basado en un concepto de ciudadanía plena dotada de una seria de derechos y garantías que recogían las nuevas constituciones. España, llego tarde, llego en el 78, la dictadura retardo nuestro acercamiento a la Europa del Bienestar. La Constitución del 78, supuso un “contrato social”, asumido por la ciudadanía en Referéndum, por los poderes económicos y políticos de la época. En julio del año pasado PSOE y PP perpetraron uno de los mayores atentados democráticos de los últimos setenta y tres años. Modificaron, las hasta entonces intocable Constitución, en una semana, para retocar el Artículo 135, dejando claro que tras la conversión de la deuda privada de los bancos en deuda pública: “…la deuda pública de las Administraciones se entenderán siempre incluidos en el estado de gastos de sus presupuestos y su pago gozará de prioridad absoluta.” Es decir antes que el derecho a la educación, la sanidad o los servicios públicos esta el pago de la deuda que ha generado la voracidad del sector financiero. Se consolidaba el principio neoliberal de supeditar lo político a lo económico. Ante estos hechos, la legítima pregunta es ¿A las generaciones actuales que no votamos esa constitución y que suponemos el 60% de los españoles con derecho a voto? ¿Que nos une a ella? A mi poco.
¡Asamblea Constituyente Ya!
Miguel Ángel Martín

viernes, 14 de septiembre de 2012

miércoles, 12 de septiembre de 2012

El Cocodrilo de Parquet: la mascota ideal.


Cocodrilo de Parquet o Lagarto Vividor (Crocodrylus Especulator
Tengo un amigo al que le han regalado como mascota un cocodrilo. La persona que se lo ha obsequiado debe de quererle mucho, ya que hay pocos regalos tan valiosos como un cocodrilo, un animal que lleva en este mundo más de 200 millones de años y que a pesar de las apariencias, desborda cariño hacia sus dueños y tiene una sonrisa irresistible. Si además la especie regalada es el denominado Cocodrilo de Parquet (Crocodrylus Especulator), pues parece que tu fortuna no ha hecho más que empezar. Le han dicho a mi confiado amigo que este “bicho”, parece que a diferencia de otros, conforme se hace adulto, cada vez come menos e incluso algunos llegan a hacerse vegetarianos. Eso si, cuando son jóvenes comen varios kg de la mejor carne. Con esas premisas, mi cándido amigo que no dispone de una economía muy holgada, pero si la ilusión de tener un cocodrilo y la esperanza de que de adulto el reptil sea vegetariano, le ha llevado a apretarse el cinturón haciendo recortes en otros aspectos de su vida (cine, formación, ir al dentista etc…). De esta manera el cocodrilo ha ido creciendo, ya pesa mas de 415 kg, pero a diferencia de lo que le habían dicho, su mascota cada día come más carne, sin probar bocado de la verdura fresca que le ofrecen. Es tal la cantidad de carne que ingiere que mi amigo ya ayuna varios días a la semana para poder darle de comer.

Mi amigo está asustado, pues parece que todo lo que le contaron es una gran mentira, el estomago del cocodrilo parece un saco roto, nunca tiene bastante, no se calma nunca. Mi amigo ha puesto en venta su coche para poder pagarle al carnicero y ha tenido que llevarse a su mujer y a sus hijos a casa de sus padres para que Goldman, que así se llama la mascota, no se lo coma.

Mi amigo no puede más, ha basado su vida desde que vive pendiente de la mascota, en lo que parece una gran fabula. Ahora parece que solo le quedan dos caminos: a) Sigue criando ese cocodrilo hasta que no pueda alimentarlo y una mañana se despierta mientras lo devora o b) se hace una lasaña, un buen par de zapatos y un bolso*.

Moraleja: si no quiere que se lo coma un cocodrilo, no crea todo lo que le digan de los reptiles y el 15-S nos vemos en Madrid.
Miguel Angel Martín



* Mil disculpas a los colectivos den defensa de los animales, se trata solo de una fabulación.