martes, 27 de marzo de 2012

OBSOLESCENCIA SOCIAL PROGRAMADA


Está claro que hoy por hoy, cuando compramos cualquier objeto tenemos en cuenta que su uso futuro esta predeterminando en el tiempo. El fabricante ya ha previsto la durabilidad del producto, en pro del continuo consumo. Cuando hemos descubierto que esta política empresarial existe, que nuestro móvil o nuestra TV tiene unas determinadas “horas de vuelo”, cuando todavía no hemos digerido el timo que supone fabricar premeditadamente objetos con una durabilidad determinada. En ese momento descubrimos que el Estado del Bienestar ha sido un producto diseñado en la lógica de la Obsolescencia Social Programada, quien nos iba a decir que lo que parecía una conquista irreversible de la clase trabajadora podía desmantelarse en pocas semanas. Lo paradójico és que el Estado del Bienestar resulto del reconocimiento de lo injusto que resultaba el capitalismo desregulado, algo que reconoció hasta el propio mercado. Ahora sin embargo, después de la mayor crisis del capitalismo desregulado, la receta es más mercado y recorte del Estado del Bienestar. Esta semana la Asociación Estatal de Directores y Gestores de Servicios Sociales situaba a España a la cola de Europa en cuanto a la prestación de estos servicios, y en concreto destacaba la Comunidad Valenciana como una de las cuatro más deficientes de todo el estado. La Obsolescencia Social Programada, a diferencia de la Obsolescencia Programada material es que no dispone de un producto igual o superior, normalmente con más prestaciones que el anterior, al contrario, lo  lamentable de todo esto es que cívicamente estamos dejando morir un Modelo Social, y el que queda disponible es un modelo del Siglo XIX. No se pongan tristes, sean previsores y aprovechen para lees a Dickens.
Miguen Ángel Martín

miércoles, 14 de marzo de 2012

sábado, 10 de marzo de 2012

Generación crisis



Formo parte de una generación que vivió el final del "paraíso" y que siempre llego tarde a todas las citas. No por nosotros, sino porque el autobús paso antes de hora. Pero con mucho esfuerzo conseguimos llegar andando, tardamos más, no fuimos tan lejos, y llegamos a algún sitio. Sufrimos el tapón de una generación anterior, que llego de golpe al morir Franco y se instalo en el poder, hasta hoy que sigue allí apalancada. Desgraciadamente nos encontramos en un punto de no retorno para la sociedad actual. Asistimos, sino conseguimos evitarlo entre todos, al injusto proceso por el que se condena a nuestros/as jóvenes, a ser una Generación Perdida. Encima ya no sabemos si los que han acuñado el término son anglosajones y es una mala traducción, porque lo que querían decir de verdad era Generación de Perdedores (The Loser Generation). Y esto si sería más triste, porque significaría que antes de empezar a luchar hay gente que se ha rendido. Me quedo por tanto por la otra acepción, se puede estar perdido y luchar a todas horas por encontrar un camino. Que tampoco tiene porque ser el camino del que nos sacaron de un volantazo, sino otros caminos. Muchos comentan que ya hemos pasado por esto y que la cosa volverá a su cauce, ¡No es cierto! Este discurso es falso, como falso y cínico es decir que las crisis están llenas de oportunidades ¡será para Luis de Guindos que ha pasado de Lehman Brothers a ser Ministro! Estamos en un momento donde el capitalismo ha mutado y nos lleva hacia una nueva sociedad más injusta e insolidaria y menos igualitaria. No hay muchas certezas de que el futuro se vaya a parecer a nuestro reciente pasado. Lo que sí es cierto es que sin futuro, sin trabajo y sin casa no se va a muchos sitios, pero sin miedo se va a todas partes, y esa es la clave. Algo se mueve en el Morvedre más joven. ¿Nos movemos?

Miguel Angel Martín
Profesor asociado de Política Social en la UV

29 M Huelga general, la primera

El PP cree que necesita una Huelga General, para legitimarse ante los Mercados. Igual se les atraganta porque gran parte de sus apoyo electoral la va a sufrir de lleno.

Esta cita, no debe ser la única, ni la huelga debe ser la única herramienta de lucha.

Por el futuro.

LIBRO RECOMENDADO

EL MONSTRUO AMABLE ¿El mundo se vuelve de derechas? de Raffaele Simone
Puedes estar en desacuerdo en algunas cuestiones con el autor, pero el análisis que hace de la la nueva derecha, es básico para entender lo que nos viene encima.


¿El concepto de izquierda sigue teniendo sentido hoy día? Desde hace tiempo en Occidente este conjunto de convicciones parece estar empañado y en declive. Casi ninguna de sus grandes metas históricas ha logrado realizarse y resulta difícil creer que alguna idea de izquierda vaya a conseguir modelar el futuro próximo. Europa, y en cierto sentido el mundo, tiende a la derecha.
Todos los esfuerzos de la izquierda para adaptarse a los nuevos tiempos han sido insuficientes. La derecha, en su forma globalizada y mediática, ha sido la verdadera sorpresa del panorama político-cultural de principios del siglo XXI: promete felicidad y bienestar para todos. Está muy al día en cuanto a imagen y técnicas de propaganda, quiere parecer moderna y vital. Es el Monstruo Amable, el rostro sonriente de este nuevo despotismo que degradará a los hombres «sin atormentarlos».
La consolidación de este modelo ha impuesto la noción de que las distinciones ideológicas ya están superadas, ha descabalado los principios de la izquierda y ha alejado a una gran masa de sus simpatizantes naturales. La izquierda ya no encaja con el mundo en que vivimos hoy. Se ha visto obligada a aligerar drásticamente sus aspiraciones y sus ideales han ido haciéndose cada vez más genéricos y conciliadores. A sus partidarios les toca ahora una tarea descomunal: buscar nuevos contenidos a la altura de los tiempos capaces de llenar de formas modernas el envoltorio ya casi vacío en el que todavía se lee «izquierda».

viernes, 9 de marzo de 2012

11 M


Todo vuelve


Hace años que tengo por casa en algún recóndito cajón un Cubo de Rubik. También debo conservar algún pantalón de camal bastante ancho; algún que otro disco en vinilo y un montón de gafas usadas que almaceno con regularidad desde que tenía seis años. No me pregunten porque lo hago, porque con certeza no lo sé. En algún caso se trata de pura nostalgia o apego al recuerdo como puede ser el de mis viejas gafas, pero en otros quizás sea la ilusión de volver a ponerme aquella vieja camisa a cuadros, sin que para ello tenga que soportar miradas inquisidoras de los talibanes de la moda. Pues bien resulta que esto no solo nos pasa a los más comunes de los mortales, sino que el liberalismo económico es igual. En los sucesivos momentos históricos en los que pensábamos que estaba mal herido y que había reconocido que sus excesos nos llevaban a la abismo, resulta que el Capitalismo no estaba muerto, estaba de parranda. Estaba guardando en un cajón a la “mano Invisible” igual que yo hice con mi Cubo de Rubik; y colgando en una percha las teorías del “Desempleo Voluntario” de economistas como Arthur Pigou; y trasladando al trastero toda los Juegos Reunidos de la infamia y el descrédito hacia los sindicatos. Es curioso como esta moda Vintage Neocon continuamente inventa y reinventa estilos, lo más habitual es que de la combinación de los viejos, vayan surgiendo los nuevos, Por eso no es de extrañar que tras la mayor de las crisis del Neoliberalismo, la receta sea más Mercado y menos Estado; que la Montaraz Patronal española haga suyo el discurso de un refinado economista ingles y diga que la causa del desempleo es consecuencia directa de la falta de flexibilidad del mercado de trabajo que no se adapta a las circunstancias; o el ataque casi diario de la TDT Party, y la Quinta Flota Mediática de la derecha más rancia hacia los sindicatos. Keynes ya contesto a estos argumentos en 1936, afirmando que la bajada de los salarios solo cabria en un régimen autoritario que hubiese desmontado el poder de los sindicatos. ¿Ahora lo entienden todo verdad? Yo también.

Miguel Angel Martín