miércoles, 9 de marzo de 2016

Memoria y Utopía

Gonzalo Montiel era un pesimista, aunque el hubiese afirmado como Jose Saramago, que no, que el mundo era pésimo. O hubiese citado rápida y ágilmente a Benedetti “en realidad soy un optimista bien informado”. Yo creo que Gonzalo era un tipo bien informado en un mundo pésimo. Digo pésimo, porque en un mundo perfecto no haría falta gente como él. Tipos con la necesidad vital de mejorar lo que les rodea; de cambiar situaciones injustas; de luchar; de movilizar recursos para devolver este mundo a un equilibrio justo. Lejos de buscar el cambio a través de liderazgos visibles, Gonzalo trabajaba por transformar casi en la “clandestinidad”, desde su despacho en la gestión cultural de la UV o el de profesor asociado de sociología en la Jaume I. Siempre en un segundo plano, siempre discreto, pero siempre eficaz.

Jamás pensé que me costaría tanto despedir a un amigo, a un igual, a alguien con el que he crecido en todos los aspectos: el vital, el social, el político y también el académico. Sé que nunca estamos preparados para afrontar el duelo de nuestros seres queridos, pero cuando se van aquellos con los que piensas envejecer, seguir compartiendo proyectos, risas, cenas,  junto a otros grandes amigos, criticando a los de siempre y fumando puros a escondidas…. El descoloque es demoledor. Desde el 27 de diciembre del pasado año, no dejo de darle vueltas a lo frágil de nuestras vidas, de nuestras relaciones, de lo efímero, del partir sin despedida, del irse y no volver. Este hecho aparte de generarme algunas noches de insomnio, me está haciendo replantearme muchas cosas. Buscar y rebuscar en esos espacios de sentimiento y cariño que todos llevamos dentro y que olvidamos en lo cotidiano del día a día. Prisas, rutinas, estrés, que generan días grises que nos hacen olvidar y callar: De no decir te quiero todas las veces que hace falta; de olvidar el beso y el abrazo al amigo; de no relajarse jugando con tus hijas; de no disfrutar del sol en la cara en una tarde hibernal; de no perder el tiempo…. Si esto mismo se lo estuviese contando a él delante de un almuerzo, me diría sin titubeo “Oye Martin (si sin acentuar como los americanos, no me pregunten por qué, pero es así desde el instituto), esto debe servirnos para reflexionar, estamos en una edad delicada, una edad para querer y que nos quieran, pero sobre todo para que nos quieran…”

Esa última frase ocupo muchas de nuestras últimas conversaciones relacionadas con nuestro territorio, con nuestro Puerto de Sagunto y con ese proyecto colectivo al que llamamos AMIMO (Asociación Memoria Industrial y Movimiento Obrero), refugio de cariño, amistad, saber y agitación cultural de un puñado de locos que hace más de veinte años decidieron quedar a tomar café en un emblemático bar de su pueblo, y devolverle a este lo que les había dado: el orgullo de pertenecer a un pueblo curtido en la lucha obrera, de militancia, de solidaridad, de comunidad… sin más identidad que esa. Es imprescindible nombrar a esos “imprescindibles” de los que tanto he aprendido además de Gonzalo, a: Carles Xavier López, Jose Manuel Rambla, Paco Zarzoso, Ximo Revert, Vic Pereiró…. Esta es la esencia de Gonzalo, te ayuda a ser mejor incluso en su ausencia.

Pero era más cosas, era sobre todo respuestas. El tenía respuestas, yo diría que para todo. Escuchábamos siempre atentos sus respuestas ante temas diversos, desde el futbol (que nos pilla de refilón) hasta el futuro de la izquierda, pasando por el Derecho Alemán del que se había hecho gran conocedor. Bueno, lo cierto es que como a todo le ponía esa pasión “gonzaliana”, al final era experto de todo lo que tocaba. Sabía guiarte para que te hicieses las preguntas adecuadas, pero sobre todo era un hombre de respuestas y eso es precisamente lo que yo más echo de menos. Llevo varios meses que me faltan respuestas, me imagino que también terminara tirándome un capote para que busque la manera de solventarlo. Quizás el homenaje de la Universitat de Valencia titulado “Gonzalo Montiel: Memoria y Utopía” ya nos está dando una pista. Gracias Gonzalo.


Miguel Angel Martín


viernes, 5 de febrero de 2016

22.000 razones más para que se vayan

Hace más de seis años que muchos de los que hoy están presuntamente “imputados” o según la última reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal hecha por el PP “investigados”, por corrupciones varias en nuestras tierras valencianas; se dirigían por la TV, Radio o prensa, a los padres y madres de los más de 22.000 jóvenes valencianos que han tenido que emigrar forzosamente por razones socioeconómicas; y les decían compungidos cosas como estas: “...hemos vivido por encima de nuestras posibilidades y ahora hay que apretarse el cinturón…”; “Todos tenemos que hacer esfuerzos y los políticos debemos dar ejemplo…”. Las familias que vieron partir a sus hijos e hijas, a buscarse la vida fuera de su país con su abultado curriculum, tienen que tragar mucha saliva para contener la rabia ante tanto presunto geta y sinvergüenza. Tiene narices que te dejen sin futuro, mejor que nos dejen, y encima te roben a dos manos.

El periodista Sergi Castillo en su libro “Tierra de saqueo”, calcula que la factura de la corrupción en la Comunidad Valenciana supera los 12.500 millones de euros (para que se hagan una idea eso es más o menos el presupuesto de la GV de un año). En todos estos años de austericidio, la ciudadanía de a pie, los que pagamos todas las facturas (rescates de bancos, repagos  etc.) hemos sufrido recortes drásticos en Sanidad, en Educación, en Dependencia, Servicios Sociales, en los programas de becas; el aumento de las tasas universitarias. Hemos visto como el desempleo en jóvenes de 18 a 24 años se situaba en el 55%; y como se ha precarizado el poco empleo que se crea; Sabemos que más de 260.000  jóvenes valencianos entre 17 y 30 años están en riesgo de exclusión social. Hemos conocido por los autos judiciales que en todo ese tiempo ellos seguían comisionando al 3%. Además del negativo impacto económico futuro que supone que otros países se aprovechen de nuestro capital humano (se ha calculado que perderemos más de 8200 millones en 10 años). Pero no pasa nada, a estos cracs de la gestión cuanto peor nos vaya a nosotros, para ellos mejor. Todo lo que sea deteriorar lo público (lo de todos), sirve para abrir de una patada (a lo Corcuera, que parece que ha vuelto como Rocky - habra que analizar este revíval ochentero de manera mas profunda) la puerta al aprovechamiento privado de los bienes públicos. Y de paso asegurarse un retiro dorado en esas mismas empresas.

Hay, al menos, 22.000 motivos y más de 260.000 razones por los que esta gente no puede poner las manos en nuestro futuro. Ojo, tampoco podemos permitir que lo pongan aquellos que se disfrazan de “los nuestros” y terminan vendiéndonos por 135 monedas. Pero amigos y amigas, todo no debe ser pesimismo; la gente corriente no nos podemos permitir la tristeza; corren vientos de cambio, de regeneración, de ciudadanía, de comunidad… y como cantaba algún grupo de estos hípsters en un bonito anuncio de cervezas (cuanto nos ha ayudados la ancestral bebida a soportar al PP, nunca podremos pagárselo), “lo importante es tener finales”. Disuelvanse!!


Miguel Ángel Martin

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Futuro "Z"

Futuro "Z"
Definitivamente los “zombies” están de moda. A pesar de lo que puedan pensar, algunos títulos cinematográficos como “Guerra Mundial Z”, no tienen nada que ver con el expresidente del Gobierno Jose Luis Rodriguez Zapatero, otra cosa es que el último año de Zp coincidiese con el inicio de este auge del mundo “zombie”. Series ya míticas como Walking Dead, basada en el comic de Robert Kirkman, nos remiten a un futuro apocalíptico repleto de muertos vivientes asalvajados a los que los protagonistas denominan “caminantes”. Yo tenía un profesor que nos decía que en las épocas de desorientación, de crisis, se pone de moda el cine de catástrofes, de terror, de evasión…. Así paso en los años 70. Algo ha debido de pasar en los últimos cuarenta años, cuando al final es el cine el que parece que nos propone las metáforas más adecuadas para definir el momento que vivimos. El neoliberalismo ha campado a lo ancho y largo de nuestras sociedades, ocupando cualquier resquicio de poder, desde el político hasta el familiar; el consumo, la deudocracia nos ha contagiado de tal forma que en muchos casos somos iguales que esos “caminantes” que nos dirigimos diariamente, con el mismo espíritu crítico que un zombie, a nuestros trabajos, a nuestros templos de consumo o incluso a depositar nuestra papeleta con la “Z” en las urnas. Aunque lo parezca, todo no es tan apocalíptico, pero sí puede ser trágico. En el sentido griego, porque en esta ocasión, creo que más que en cualquier otro momento de la historia moderna, el futuro depende de nosotros. Creo que todos y todas, tenemos la oportunidad de marcar un antes y un después en lo que queremos que sea el mañana. Pero hay que hacerlo sin miedos, sin complejos. No es momento de quedarse con el mal menor, con el más vale malo conocido, es el momento de dar una oportunidad a la esperanza, a cambiar. A vivir mejor, a ser felices, que al final es a lo que aspiramos la gente normal. El futuro no tiene por qué ser Z, podemos ser “caminantes”, pero bien vivos, con esperanza, con los ojos bien abiertos. Ellos no, ellos a pesar de su poder si son Walking Dead, y lo saben.

Miguel Angel Martín

miércoles, 4 de noviembre de 2015

Puertos

1983. este si es mi Puerto
Un día, hace ya algún tiempo, cuando todos éramos más jóvenes, trás una discusión sobre la idiosincrasia porteña, mi padre con el que no solía hablar de estas cosas, me espeto desde su sillón “¿pero tú que te crees, que solo hay un Puerto?”. Aquella sencilla pregunta, hecha mientras mi padre ojeaba el Marca (el único defecto de mi padre era su madrilismo medular, cosa que siempre le perdone), me hizo no solo reflexionar sino afianzar una posición, en la que hoy sigo manteniéndome. Pero vayamos a la pregunta, ¿Cuántos Puertos cree usted que existen? Espero que este ejercicio lo puedan hacer en casa con sus familiares o amigos, personalmente para mí habría un minino de cuatro, ubicados en ejes diferentes.

Hay un Puerto de los de arriba y otro de los de abajo. Y también hay un Puerto de ayer, del pasado y otro del futuro, que lucha por seguir existiendo. El Puerto de los de arriba, es de color gris perla (me encanta la expresión de Ángel Gonzalez que hablaba del gris, color ala de mosca para referirse a los años del franquismo), lleva bigotillo reaccionario, sus maestros aunque se reciclen en facebook dan collejas y apagan sus puros en libretas infantiles de irregular caligrafía. Es el Puerto de “Una patria, un estado, un caudillo 2.0”. Lucha por retener el poder perdido. Han encontrado una via y se aferran a ella, llenando de esencias algo que es pura estrategia de mantener el poder. Luego están los de abajo, esos son entre los que nací y me crie. Perdedores históricos, gente luchadora y que nunca perdió la dignidad. Es el Puerto del compañerismo, de la camaradería, de la vecindad, el solidario, el que busca la justicia, la igualdad. Sin procesiones, es laico porque tiene memoria, pero respeta a la iglesia del pueblo, a gente como Juan Camarena. El Puerto del pasado, el del blanco y negro, se empeña en revivir viejas postales amarillentas, no le interesa que el pasado sea un impulso para afrontar el futuro, prefiere recrearse en él, como si el reloj se hubiese detenido para siempre. Tiene muchas fortalezas que podría aprovechar pensando en el futuro pero no las ve. También hay un Puerto del futuro, nihilista respecto al pasado, a su patrimonio, vacio, que reescribe la historia en su provecho, con el único objetivo de justificarse.

En este mapa con dos ejes, deberíamos hacer un esfuerzo por situarnos. El sociólogo francés Jean-Claude Kaufmann, experto en Identidades, plantea que en estas sociedades individualistas y democráticas, la identidad se deduce de una subjetividad que actúa con vistas a producir un sentido que ya no está dado por el lugar social ocupado, y no solo para responder a la pregunta existencial ¿quién soy? De todos los Puertos, cada uno deberíamos hacer el esfuerzo por situarnos en este mapa, está claro que esos cuatro Puertos son una reducción argumental, son extremos. Hay muchos más, en una sociedad democrática y plural casi todos imprescindibles. Lo que nunca pretenderé será imponer al resto mi Puerto, ni rechazar al resto, yo me quedo con El Puerto de los de abajo, de los que menos tienen, el del bien común, que bebe en su mejor pasado de lucha social y obrera, para seguir existiendo en el futuro defendiendo esos valores independientemente de la fórmula político-jurídica que lo administre, ese es el que me da sentido. El resto me da igual, no me representan, no tengo nada que ver con ellos.


Miguel Angel Martín

miércoles, 29 de julio de 2015

ComPPamplinas 100%

La nueva cara amable del PP, Pablo Casado ha presentado la nueva web CumPPlimos con la que el PP pretende recuperar el espacio político perdido. Después de cuatro años sin hablar, sin dialogar, cepillándose el Estado Social, legislando a favor del oligopolio, aprobando leyes que acallan la protesta y la criminalizan… después de la “éclosion…” (tono afrancesado) de casos de corrupción que están poniendo sobre la mesa que son algo más que simples manzanas podridas… después de todo esto, el PP parece que quiere hablar con las Mareas, con los Círculos, con todo el mundo. Se rumorea que incluso Gonzalez Pons se ha dejado una larga coleta. Hay que ver cómo te sensibiliza, como te acerca al pueblo llano la proximidad de unas selecciones…

Lo cierto es que el nombre de la nueva web del PP suena a chiste, decir a estas alturas que has cumplido el 92´5 % de tu programa electoral, cuando no has respetado ni los mantras neoliberales de bajar impuestos, suena como mínimo a tomadura de pelo. Casado este jovencito verborreico que ha ido escalando en el PP, bajo la máxima “a ver si la digo más gorda que Floriano”, ha llegado a decir que el Gobierno de Rajoy "está haciendo honor a la palabra dada”. Seguro que todos y todas recuerdan cuales eran las líneas rojas de Mariano cuando estaba en la oposición, si no se las recuerdo yo: educación, sanidad, pensiones, prestaciones por desempleo y además prometió ultimar una reforma laboral sin abaratar el despido…

Mi abuelo a esto lo llamaría ComPPamplinas, y no es para menos. Si algo ha demostrado el PP ha sido su falta de compromiso, su falta de respeto a la palabra dada, que en política se resume en el cumplimiento del programa, o como mínimo los compromisos irrenunciables, esas líneas rojas, esas que no tardo en traspasar con la misma rapidez que las empresas de la Ghurtel te facturan humo y la misma  delicadeza con la que un elefante entraría en una Apple Store Oficial. El PP ha conseguido en cuatro años (con la inestimable ayuda de ZP), cargarse la confianza de los españoles en el gobierno, hoy por hoy de las más bajas de Europa, según la Encuesta Social Europea (EES) el índice de confianza de los españoles en la política se encuentra en el nivel "más bajo" de los últimos diez años. Pero tan poco se puede ser muy duro con ellos, al fin y al cabo han gobernado para los suyos, por que el Partido Popular ConloPPoderososcumPPle y de que manera.

Disfruten del verano, un abrazo.


Miguel Angel Martín

jueves, 16 de julio de 2015

No hay común, sin futuro

Manel Fontdevila en 2010
No sorprendería a nadie si hoy mostrase aquí mis simpatías por Podemos, al igual que las manifesté en su día con el 15M. En aquellos días, muchos, esperábamos que desde la izquierda se fuese capaz de articular una respuesta a la ofensiva neoliberal que se había llevado por delante al incapaz, por no saber o no querer dar una respuesta socialdemócrata a la crisis, que fue el Presidente Zapatero. Era el 2008, los líderes mundiales del G20 se reunían en Washington para emular un segundo Bretton Woods y refundar el capitalismo; mientras en España, Izquierda Unida,  en su asamblea decidía iniciar un proceso de refundación, algo que culminaría en 2010 con una asamblea de refundación llena de viejas caras, donde evidentemente se refundo poco o nada. Como en la cumbre del G20, tampoco refundaron el capitalismo sobre bases éticas, como decía Sarkozy (ahí! Que me parto…) todo parecía indicar que teníamos un empate técnico que dejaba las cosa en sus sitio. El problema es que no fue así, tras los primeros asaltos, el capitalismo desregulador se levanto de la lona y lejos de tirar la toalla, con la energía que da que te cubran tus pérdidas con dinero público, comenzó a golpear a la parte más débil de la sociedad, con la complacencia de gobernantes de diverso signo político. En esa tesitura, la izquierda no hizo sus deberes, y como no se refundo de verdad, con sincera generosidad, le broto al lado como un esqueje, un Podemos. Los chicos y chicas que hacían esas propuestas tan chulas y novedosas de los programas de IU, dejaron de ser los guionistas fedatarios que elección tras elección veían como al final primaban más las cuitas internas que luchar contra la mayor ofensiva neoliberal de la historia. Esto requeriría de una potente autocritica, que aún no he visto ni en Madrid, ni en Valencia.

Creo que el éxito de Podemos, radica en que ha sido vista como una herramienta de cambio por parte de la población más castigada por la crisis, que es mucha. La gente ha elegido quien quiere que lidere la Resistencia hasta convertirla en Ofensiva. Todo en la vida no es resistir, llega un momento en el que hay que ilusionar planteando futuro. No olvidemos que las herramientas deben cumplir un objetivo, para ello se mejoran, se perfeccionan, se sustituyen por otras, siempre pensando en la manera de cumplir esa misión. Los partidos que se autodenominan socialdemócratas, hace tiempo que olvidaron cual es su misión, a quien deben defender. La aparición de la iniciativa “Ahora en Común” ante la negativa de Podemos a coaligarse con IU, no termina de entenderse, si analizamos a quién beneficia esta lucha por apropiarse de “lo común”. La contraofensiva de IU, no deja de aprovechar la estrategia de Podemos para las municipales. Esa indefinición dejo un hueco por el que parece querer colarse la formación de Alberto Garzón dispuesta a hacerse un lifting por necesidad más que por convicción. Dentro de IU hay demasiada gente callada, en silencio, y es muy extraño siendo esta una organización donde por lo general hablan demasiados. Entiendo la postura de Podemos, presentarse como aliados de la “vieja política” resta más que suma, y la caverna mediática está esperando colocar las piezas en su tablero; me temo que los tiempos políticos van tan rápido que asistiremos a muchos cambios de postura en los próximos meses, solo espero que las decisiones sean las acertadas y equilibras para saber combinar lo mejor de lo nuevo y lo viejo. Hay mucho en juego. El Ahora es importante, pero cuidado, no hay Común sin futuro.


Miguel Angel Martín

miércoles, 1 de julio de 2015

Antes muertos que con Grecia...

Este parece ser el mantra que repiten de manera continuada los miembros del Eurogrupo (no no se trata de un equipo de superhéroes al estilo de los Cuatro Fantásticos o Los Vengadores, más bien serian, en lenguaje Marvel, una especie de "Mutantes Neocons" en la línea de los X-Men); y el FMI o el BCE, que juntos forman la Troika (Una especie de alianza del mal el pro de la Desigualdad y la Desregulación en Europa). Estaba claro que tras la victoria de Syriza en Grecia, los representantes del austericidio de los de abajo (los de arriba nunca han ganado tanto como en estos seis años de crisis)  no permitirían que este gobierno sacase adelante sus propuestas. Por dos motivos fundamentales. Por un lado, hacerlo seria asumir que la línea económica de la UE ha sido más política que técnica, más orientada a sentar las bases de una nueva sociedad basada en la desigualdad, de romper el contrato social de los años dorados tras la II Guerra Mundial, una manera de sacar a los países de una crisis a costa de los de abajo, con la intención de que nada cambie en el futuro. Una crisis, que está siendo sufragada por la gente normal, han sido capaces de socializar las perdidas con subidas fiscales directas e indirectas, bajadas de sueldo, subidas de precios de servicios básicos etc… Por otro, aceptar las tesis de que se puede afrontar esta crisis de otra manera, controlar a los siervos del Minotauro Global que diría Varoufakis, podría provocar el efecto contagio en otros países europeos como el nuestro. Y eso, no lo pueden permitir. La maquinaria noecom lo ha apostado todo a un numero, el 4, y a una conjunción, el “si”. Van a quemar todas las naves y recursos a su alcance, utilizaran la herramienta que mejor les ha funcionado en estos últimos años; el miedo. El problema es que cuanto menos tienes, menos miedo te queda. Esperemos que desde Grecia, nos llegue la última gran lección de democracia. Nos jugamos el futuro, que si gana el SI será una gran tragedia Griega, pero no solo para Grecia.  #JovaigambGrècia

Miguel Angel Martín

viernes, 19 de junio de 2015

No, no se puede pasar así la vida...

Fachada del IB Camp de Morvedre
“No, no se puede pasar así la vida, sin poder vivir, sin poder hacer vivir, y morir inútilmente, no habiendo sido ni hecho nada”; casi cada día, apostados en la puerta del bar del viejo Instituto de Bachillerato Camp de de Morvedre, podíamos leer esta cita de Samuel Beckett en uno de los murales que adornaban la fachada del salón de actos. La recuerdo como si la hubiese leído ayer por primera vez. Aunque pueda parecer intrascendente, creo que es una frase que da mucho que pensar cuando eres un adolescente y la vida se te abre por delante. Y casi sin querer, contiene unos principios vinculados al bienestar y al bien común, así como a la utilidad de la vida, entendida como la mejora de esta sociedad. Ese mensaje, que los jóvenes de aquella época, y seguramente los de ahora, captamos de manera inmediata, parece ser, que no calo lo suficiente en algunos de los cientos de alumnos/as que pasaron por este centro, ni siquiera en algunas organizaciones que en teoría pretenden guiar y mejorar nuestro futuro. 

Es una pena confundir tu “misión” como herramienta de cambio con una forma de vida; que al final sea más importante mantenerse limpio e inmaculado fuera de la toma de decisiones, que mejorar las situaciones complicadas del día a día por las que atraviesen nuestros vecinos y vecinas. La gente, que afortunadamente cada día esta más al corriente de la política, no entiende que espera una organización cuando se presenta a las elecciones ¿ganar por mayoría absoluta? ¿estar en la oposición? Quizás fuese interesante dar esa información antes de la cita electoral. Tampoco se entiende que para argumentar posiciones inmovilistas, haya que recurrir a la mentira y a hacer revisiones del pasado al más puro estilo de la “Gran Purga”, deformando la realidad a conveniencia y manteniendo ese principio básico del “enemigo interior”, tan útil para justificar incompetencias.


En fin, para los que no jugamos esas ligas, resultan patéticas e inútiles esas posturas, los tiempos que vienen son ya de por si complicados para enredos de “bunker”. Que conste que no me dan ninguna pena los aprendices de apparátchik, van a ser barridos por la ola que se avecina, aunque busquen salidas de urgencia para seguir justificando su presencia. Lo siento por toda esa gente humilde y trabajadora que por culpa de la inoperancia de estas “dinastías” o “elites”, van a perder un referente fundamental en la vida política de este país.

No, no se puede pasar así la vida… pero desgraciadamente pasa.


Buena suerte. (En coreano 행운을 빌어요)

Miguel Angel Martín

jueves, 4 de junio de 2015

Los tiempos están cambiando

“……..Vengan padres y madres de alrededor de la tierra
y no critiquen lo que no pueden entender,
sus hijos e hijas están fuera de su control,
su viejo camino envejece rápidamente,
por favor, dejen paso al nuevo si no pueden echar una mano
porque los tiempos están cambiando….”

Bob Dylan - The Times They Are a Changin ... (1963)


Hablar, analizar, justificar, recomendar, pactar son verbos que suelen utilizarse tras la celebración de cualquier cita electoral. Estábamos más acostumbrados a las justificaciones a nivel estatal, pero llevamos un par de semanas asistiendo a un espectáculo mediático y calculado a escala local. Lo destacable de todo este proceso y en mi modesta opinión, es la diferencia que separa a los diferentes partidos políticos en dos grandes grupos: los que se han dado cuenta de que los tiempos están cambiando, que diría Bob Dylan, y que lo está haciendo "....sin remisión", que dirían Loquillo y Los Trogloditas (esto en clave-cuarentones). Las urnas han hablado y han dejado claro que la ciudadanía está en otra cosa, está muy quemada, porque su vida ha empeorado en estos últimos años, y quiere mejorar. Quiere que la política sea de otra manera. Los y las votantes han premiado a los partidos que hace tiempo que iniciaron su transformación, o incluso a los que han aparecido en los últimos tiempos y que reclaman que la política sea diferente. Contar votos tras unas elecciones, sumando, restando, sacando porcentajes con una tabla de Excel y rescatando de los cajones conceptos como “voto rural”, en esta ciudad (aun tengo agujetas en el estomago) es cuanto menos un deporte de riesgo. El pueblo ha hablado, además de manera sabia. Como decía, la gente está en otra cosa, lejos de frentismos: Compromís ha sido el partido más votado, entre otras cosas porque ya no es el Bloc, es otra cosa. Y la mayoría del electorado así lo ha interpretado. En el caso de IP, que también inicio su renovación hace tiempo, pasando de Segregación a Iniciativa Porteña, argumentar como superioridad para marcar la agenda de EU, que se és el partido más votado en Puerto tiene sus riesgos. Se podría argumentar desde otro punto de vista que sus resultados (4014 votos) quedan lejos del 51% de votos totales del Puerto (20.038 votos). En todo caso, creo que su papel es muy importante si son fieles a su nuevo nombre, sin duda su aportación será mucho más útil para la gente de Puerto e incluso para la de toda la ciudad; ADN Morvedre sigue siento una promesa de futuro y una gran incógnita de presente; PSOE y PP han aparecido como dos partidos viejos y exhaustos. El PSOE está claro que ha pagado sus “maniobras orquestales en la oscuridad preelectoral”, y el PP no ha sabido sacar provecho de haber sido el partido que ha tenido la suerte de tener la mayor capacidad de inversión de la historia de esta ciudad (Plan Zapatero; Canon del Agua, Patrimonio Municipal del Suelo, Plan Confianza etc...) y un programa de gobierno que le dejo hecho el “Tripartito”, como ellos llaman con desdén en 2003; C´s, ha respondido a las expectativas creadas, y parece haber recogido lo perdido por el Partido Popular; EU, con su “lifting” ha recogido mucho voto joven y una parte del desencanto socialista, más una parte del voto “Podemista” que no terminaba de identificarse con la candidaturas de ADN, pero tiene el futuro complicado, Hay una parte de su militancia que no le gusta gobernar, y otra que piensa que están ahí para cambiar algo, el eterno dilema. En definitiva, los tiempos ya han cambiado, ahora hay que ver si la política se ha dado cuenta y lo ha entendido. Al tiempo.

                                                                                                                                Miguel Ángel Martín

 

miércoles, 20 de mayo de 2015

Defender la alegría como una trinchera

En estos tiempos que corren, ante unas elecciones municipales y autonómicas que parece que pueden cambiar algo el actual sistema sociopolítico, a veces me pregunto en qué se podría sustanciar ese cambio. Le he dado muchas vueltas, he intentado explicárselo a mis hijas; incluso ante una barra de bar con el primer café de la mañana he entrado en alguna conversación de puntillas; y al final, mira por donde, la respuesta la tenía en la cabeza, me la metió ahí hace muchos años un poema de Benedetti: El papel de la nueva política es “Defender la alegría…”. Así de simple y a la vez de complejo. 

Pero, ¿qué es esto de defender la alegría en estos tiempos tan tristes y oscuros? Pues, sinceramente creo que es lo que siempre hemos intentado desde siempre los más, los trabajadores, los sin casi nada pero que terminamos pagándolo todo. Es sinceramente aspirar a una vida igual, justa, digna y en comunidad. Donde nadie se vea privado de ser feliz y disfrutar una vida plena, en el presente no en un futuro lejano, que es una obligación mejorarlo, pero el presente solo se vive una vez. Donde lo importante sea el ser, no el tener. 

En todo ese proceso, es necesario defender esa alegría de la melancolía que produce un sistema cuyo pedigrí es la desigualdad; Defenderla también de los canallas que te hablan de austeridad y esfuerzos mientras te roban la cartera; Defender la alegría del oxido y la roña, de los que no han aprendido nada, del oportunismo de los mismos perros con diferente collar… 

Nunca le he dicho a nadie lo que tiene que votar, si les he propuesto alguna vez un programa electoral, tampoco acepto que nadie me diga lo que debo hacer, pero hoy déjenme que les de un consejo: si usted es como yo, de los debajo, de ese 99% que pagamos todas las cuentas, el domingo no se quede en casa, vote por la alegría, a los que se comprometan a defenderla, como una trinchera, como un principio, como una bandera, como un destino, como una certeza, y sobre todo como un derecho….no se queden en casa al borde del camino, inmóviles…

Gracias Benedetti (14 de Septiembre 1920 – 17 Mayo 2009)


Miguel Angel Martín